Desde hace varias décadas los limeños hablan de apariciones y sonidos aterradores, que hacen de aquella planta inhabitable. Hay diferentes versiones del origen de aquel espanto, todas ellas envueltas en situaciones críticas, asesinatos y suicidios.
Durante casi 100 años funcionó frente a aquella casa el Panóptico de Lima, que no era más que la prisión de la ciudad. Según cuentan, la casa sirvió como lugar de interrogatorios. Pero las historias que rodean la casa datan de comienzos del siglo XX.
Panóptico de Lima en 1875 |
Otra versión señala a una familia de orientales. El esposo trabajaba todo el día y regresaba muy tarde a casa. Un día el hombre llegó mas temprano que de costumbre, encontrando a su esposa con su amante en su recámara. El hombre enloqueció de ira y asesinó a ambos. Al no poder ocultar el asesinato a sus hijos, los asesinó también y se suicidó después.
Una tercera versión trata de un hombre abusivo con sus sirvientes, quienes deseaban vengarse. Para ello elijen una cena que el hombre celebró con sus amigos. Los sirvientes pusieron algo en la comida o bebidas, que produciría locura temporal.
Al cabo de un rato se escuchaban gritos y un gran desorden en la casa. Cuando los sirvientes acudieron se encontraron con una escena espeluznante: los invitados enloquecieron y se asesinaron unos a otros, dejando cuerpos mutilados y sangre por todas partes. La impresión fue tal en los sirvientes que enloquecieron y pasaron el resto de su vida internados en un manicomio.
Se habla de un religioso que trato de bendecir la casa, pero al empezar la ceremonia escuchó los gritos desesperados de los espíritus de la casa, e incluso recibió golpes y escupitajos de ellos. Tanta fue la impresión del religioso que murió. Algunos trabajadores nocturnos describen a un hombre con sotana mirando por las ventanas de la casa...
Otro caso, aunque éste sí documentado, fue el de un animador de televisión: Humberto Vilchez.
El hombre prometió ante cámaras que pasaría siete noches en la casa Matusita con una cámara, con lo cual demostraría que no era real lo que contaban de ella.
Sin embargo, al poco tiempo el hombre salió de la casa gritando, maldiciendo y botando espuma por la boca. El animador sufrió de alteraciones mentales y tuvo que ser internado en un manicomio, donde permaneció trece meses. Aunque él luego negó haber entrado a la casa...
El hombre prometió ante cámaras que pasaría siete noches en la casa Matusita con una cámara, con lo cual demostraría que no era real lo que contaban de ella.
Sin embargo, al poco tiempo el hombre salió de la casa gritando, maldiciendo y botando espuma por la boca. El animador sufrió de alteraciones mentales y tuvo que ser internado en un manicomio, donde permaneció trece meses. Aunque él luego negó haber entrado a la casa...
Algunos hablan de fraude, refiriéndose a que solo sea el segundo y no también el primer piso el embrujado.
Otros señalan el tiempo en que la embajada estadounidense se ubico cerca a la casa, en épocas de la Guerra Fría, cuando los norteamericanos querían alejar curiosos de su embajada. Afirman que la historia fue inventada y difundida por ellos. Sin embargo la leyenda de la casa se remonta a mucho antes de la llegada de aquella embajada, por lo que no convence a todos la explicación.
Otros señalan el tiempo en que la embajada estadounidense se ubico cerca a la casa, en épocas de la Guerra Fría, cuando los norteamericanos querían alejar curiosos de su embajada. Afirman que la historia fue inventada y difundida por ellos. Sin embargo la leyenda de la casa se remonta a mucho antes de la llegada de aquella embajada, por lo que no convence a todos la explicación.